Penalizaciones en SEO

En los últimos años, el número de actualizaciones del algoritmo de Google ha ido aumentado de forma considerable. Ya no se trata de un par de cambios al año, sino de un escenario en el que cada pocos meses el buscador reajusta realiza algunos cambios o reajusta criterios, pudiendo afectar a webs tanto para bien como para mal.

Fuente: Status.search.google.com

En este artículo hablaremos en general sobre penalizaciones SEO centrándonos particularmente en las penalizaciones manuales y algorítmicas.

¿Qué son las penalizaciones SEO?

Cuando hablamos de penalizaciones SEO, nos referimos a acciones que toma Google para “castigar o sancionar” a una página web que considera que ha infringido sus directrices y sus políticas que tienen un impacto negativo en el sitio web, disminuyendo la vialidad y el tráfico.

Esto no siempre puede ocurrir porque hayas hecho algo que no se considere legal, pero sí porque el buscador ha interpretado ciertas acciones como engañosas, artificiales o de baja calidad.

El efecto puede ser grande: una caída en picado del tráfico, pérdida de posicionamiento en palabras clave importantes, o directamente quedar fuera del índice. Lo preocupante es que, si no sabes identificar la causa y sigues por el mismo camino.

Y no, no hace falta estar haciendo las cosas mal intencionadamente para acabar penalizado. En este caso, lo importante es estar actualizado en base a las buenas practicas.

¿Cómo funcionan las penalizaciones SEO?

En este artículo vamos hablar de dos de las penalizaciones más frecuentes:

• Penalización manual: Un revisor humano analiza tu web y determina que incumple las directrices. En ese caso, te lo notificarán en Search Console con detalles concretos.

Dentro de Google Search Console en la parte de la izquierda hay una sección que se llama «Seguridad y acciones manuales» Del mismo modo, se notifica también en la zona de mansajes.

• Penalización algorítmica: Al contrario que las manuales, no hay intervención humana directa. Es el propio algoritmo el que, tras una actualización, puede identificar patrones sospechosos de manipulación y negativos, ajusta tu posicionamiento sin previo aviso. En estos casos no recibirás ninguna notificación. En algunos casos no se trata de que estés haciendo las cosas mal, si no que competidores directos las están haciendo mejor que tú. Algunas de las más conocidas son: Penguin, Panda o Helpful Content Update.

Ambos tipos pueden tener consecuencias importantes para el sitio web. La manual se puede revertir con una solicitud de reconsideración y trabajo para mejorar el sitio web con acciones que vayan , pero la algorítmica suele requerir una revisión completa del sitio, corregir fallos y esperar a que Google te reevalúe.

Si te interesa, puedes leer más sobre directrices básicas de SEO de Google.

¿Qué puede provocar una penalización SEO?

Dependiendo del tipo de penalización pero en general, muchas tienen que ver con intentar engañar al sistema o hacer cosas que Google interpreta como una mala experiencia para el usuario. Aquí van algunas de las más frecuentes:

• Contenido duplicado o de poca calidad: Copiar artículos de otras webs, usar textos generados automáticamente sin revisar o crear páginas con párrafos vacíos solo para posicionar es una práctica peligrosa. Google busca originalidad y valor, no más de lo mismo.

Sobre el contenido generado con Inteligencia artificial: Os dejamos las directrices de la Búsqueda de Google sobre el uso de contenido generado por IA en tu sitio web que ha dado Google sobre ello actualmente, ya que con el tiempo puede ir actualizando el documento. Os dejamos el documento para que cada uno lo interprete y probablemente se vaya actualizando con el tiempo.

Algunas prácticas que considera abuso son: “Utilizar herramientas de IA generativa u otras herramientas similares para generar muchas páginas sin añadir valor para los usuarios”.

• Backlinks artificiales: Comprar enlaces, participar en redes o granjas de enlaces o hacer intercambios masivos con otros sitios puede parecer una buena idea a corto plazo, pero a largo puede llevarte a una penalización. 

Os dejamos las políticas sobre: Políticas de spam de la Búsqueda web de Google

• Keyword stuffing: Rellenar tus textos con la misma palabra clave una y otra vez, en todos los encabezados, títulos y párrafos, hace que tu contenido se vuelva inusable y suene robótico. El buscador ya no cae en esa trampa.
• Abuso de páginas puerta.
• Redirecciones engañosas: Mostrar una cosa a los usuarios y otra al buscador, redirigir a los visitantes a sitios diferentes del prometido o hacer cloaking (mostrar un contenido distinto al rastreador de Google) son técnicas que huelen a trampa desde lejos.
• Experiencia de usuario pobre: Si tu web carga lenta, está mal adaptada a móviles, llena de anuncios o ventanas emergentes, Google lo interpreta como una barrera para el visitante. Y eso te resta puntos, incluso sin necesidad de enlaces raros ni textos sospechosos.

Otros como contenido pirateado, abuso de dominio caducado etc.

¿Cómo Google penaliza a una web?

Algunas de las consecuencias pueden ser sutiles o muy visibles, pero suelen seguir estos patrones:

• Pérdida de posiciones en palabras clave importantes. De estar en primera página pasas a la tercera… o desapareces por completo.
• Desindexación de URLs. Algunas páginas dejan de aparecer en los resultados sin motivo aparente.
• Caída de tráfico orgánico. Ves que tus visitas se reducen a la mitad de un día para otro, sin haber cambiado nada en tu web.
• Aviso en Search Console. En caso de penalización manual, lo sabrás enseguida, porque te lo comunicarán.

Importante: No confundir “penalizaciones” con descenso de tráfico ocasionado por otros factores como errores técnicos internos, incorporación de nuevos bloques en las SERPs etc.

¿Cómo identificar si tu sitio web ha sido penalizado?

Si tienes sospechas de que algo raro pasa con tu web, te mostramos algunos pasos generales que pueden ayudarte a detectar posibles penalizaciones:

• Revisa Google Search Console: Si tienes una penalización manual, aparecerá en la sección «Acciones manuales». No te lo van a esconder.
• Identifica posibles cambios.
• Compara fechas: Si has notado una caída brusca justo después de una actualización del algoritmo. Puedes consultar en sitios como Semrush o Sistrix para ver si coincide con un cambio importante. Del mismo modo, aconsejamos que tras la finalización de updates se analicen los datos.
  
• Observa las keywords: Si tus páginas ya no aparecen para términos que solían posicionar bien, puede haber una penalización algorítmica detrás o cambios en las SERPs.
  
• Analiza el perfil de enlaces: Herramientas como Ahrefs o Semrush te pueden mostrar si tienes un pico sospechoso de backlinks tóxicos o anclajes sobre optimizados. No te olvides de los enlaces que te ofrece GSC.
  
• Verifica el contenido duplicado: Audita tu contenido, revisa para ver si tus textos están copiados o se repiten en distintas partes de tu web.

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A nivel general estas revisiones permiten detectar posibles penalizaciones o si simplemente estás ante un ajuste natural del algoritmo.

Ser conocedor de los sistemas de rankings, estar actualizado sobre los últimos update de los buscadores, además cumplir las Directrices de calidad de Búsqueda de Google, ayudará a evitar posibles impactos negativos en los buscadores.

¿Cómo intentar recuperarnos de una penalización en SEO?

La recuperación no es rápida, pero sí posible. Aquí van los pasos más recomendables:

1. Identifica la causa real: Si no sabes qué ha provocado la penalización, no puedes corregir nada. Haz una auditoría profunda y localiza errores.
2. Corrige sin atajos: Si el problema son enlaces tóxicos, desautorizados desde la herramienta de desautorizar enlaces. Aunque mucho cuidado con ello debe de hacerlo un especialista y solo cuando se está seguro ya que el impacto puede ser contraproducente, además de que Google tiene sistemas avanzados para detectar patrones de enlaces. Si el contenido es débil, mejora tu contenido, haz contenido de calidad pensando en los usuarios y no en los buscadores. Si has hecho cloaking o redirecciones raras, eliminalas.
3. Haz limpieza total: No corrijas solo lo más obvio. Asegúrate de que no hay más páginas, enlaces o estructuras problemáticas. Google rastrea todo.
4. Envía solicitud de reconsideración (si aplica): En penalizaciones manuales, puedes explicar lo que has hecho para corregir los errores. Pero no mientas ni intentes justificar prácticas grises.
5. Vuelve a generar confianza: Empieza a publicar contenido útil, bien redactado y orientado al usuario. Cuida los tiempos de carga, estructura bien los encabezados y ofrece valor real. Es un proceso que lleva tiempo, pero funciona.
6. Mide y ajusta: Una vez hechos los cambios, no te olvides del seguimiento. Revisa si recuperas posiciones, si el tráfico vuelve a subir y si las nuevas páginas están siendo indexadas correctamente.

Resolución de una penalización: Caso de éxito

Recibimos un cliente cuyo tráfico llevaba mucho tiempo descendiendo en visibilidad y tráfico hasta tal punto de que estaba pensando en abandonarlo. Aun sabiendo que podía ser un reto complicado y tras comentarlo con el encargado de la web decidimos aceptarlo. El resultado se puede ver en la captura de pantalla, Tras meses y meses de trabajo conseguimos no solo levantar el proyecto, sino mejorar su visibilidad por encima de los últimos años.

En primer lugar, lo primero que hicimos fue descartar problemas técnicos graves como «noindex» o «bloqueos por robots» auditando todo el sitio web. Auditorías técnicas, On-page y de contenidos.

Analizamos el tráfico de los últimos años, buscamos los cambios de algoritmos que se había estado implementado con cada bajada para entender o intentar entender qué estaba pasando. Del mismo modo, es muy importante conocer las «Directrices de calidad de búsqueda de Google» y estar actualizados.

Revisamos y analizamos el perfil de los enlaces.

Auditamos los contenidos y aplicamos mejoras relacionadas con EEAT trabajando los perfiles de los redactores, trabajamos el enlazado interno una parte muy importante del proyecto.

¿El resultado? como se puede ver en la imagen, es un crecimiento de la visibilidad del dominio mayor incluso que el de los últimos años.

Por tanto, si estás viendo que tu web cae sin explicación y no sabes por dónde empezar, párate, revisa todo con calma y actúa. La recuperación es posible en algunos cosas, pero requiere tiempo, trabajo y una estrategia clara.

Si tu tráfico está bajando y busca una visión de tu proyecto de nuestro equipo SEO ¡Ponte en contacto!